ITINERARIO: ADMIRAR LA MAGIA DE LAS HOJAS EN MONTREAL Y LOS ALREDEDORES

El mont Royal

Lugar favorito de los montrealenses con sus numerosos senderos, observatorios y un vasto cementerio, el mont Royal es el lugar ideal para admirar el encanto de los colores. El Lac-aux-Castors es particularmente inspirador por la mañana con el suave reflejo de los árboles en sus aguas. Sin embargo, nada supera la parte superior del Chalet du Mont-Royal desde donde se puede contemplar el centro de la ciudad, el Viejo Montreal, el Viejo Puerto y los puentes que cruzan el río San Lorenzo. 100% “instagramable” tanto de día como de noche.

Los parques y su verdor

La vida es buena en Montreal, aquí abundan los grandes espacios verdes como el montañoso parque La Fontaine (con su bonito lago, una ciclovía, campos de besibol, un parque para perros y mesas de picnic) o el parque Westmount, paraíso para los niños que disfrutan de sus barras para escalar y sus campos deportivos. Sin olvidar el parque Jean-Drapeau, el parque Maisonneuve y el parque Angrignon, perfectos para hacer un picnic o salir en familia a disfrutar de la naturaleza.

Los mercados públicos

Montreal debe su reputación como ciudad gastronómica en parte a sus mercados públicos, donde se dan cita productos frescos de temporada, plantas y flores de colores intensos. Al borde del canal Lachine, los atractivos puestos y los cafés del Mercado Atwater son un lugar de encuentro para ciclistas y transeúntes que vienen a recargar su energía. En el centro de la entrañable Petite-Italie se encuentra el Mercado Jean-Talon, uno de los mercados de agricultores más antiguos de la ciudad.

Puente Jacques-Cartier

Para un fondo espectacular de sus fotos en Instagram, elija el puente Jacques-Cartier que se ilumina al caer la noche y no deje de contemplar el paisaje al caminar por el puente. Enlazando el centro de Montreal con la Rive Sud por encima del río San Lorenzo, este puente atraviesa también el parque Jean-Drapeau pasando por las islas Sainte-Hélène y Notre-Dame, ambas espléndidas en otoño cuando los árboles se engalanan con su colorido follaje. Le garantizamos que sus seguidores quedarán deslumbrados.

El Jardín Botánico

Bordeando el inmenso parque Maisonneuve (¿quiere hacer un picnic?), a unos cuantos pasos del tan fotogénico Estadio Olímpico, vale mucho la pena visitar el Jardín Botánico de Montreal en cualquiera de las estaciones. En el otoño, son muchas las personas que acuden para admirar los maples de color rojo brillante y las últimas flores de los jardines al aire libre o experimentar los sorprendentes microclimas de los invernaderos interiores. ¡Toda la familia pasará un día a todo color!

Los barrios animados

No se debe perder un paseo otoñal por los barrios de Montreal. Por ejemplo, vale mucho la pena visitar el Viejo Montreal para admirar su arquitectura que data del siglo XVI al XIX, sus modernas boutiques y sus restaurantes de moda. Siga su visita por el Mile End, donde lo esperan pequeños cafés característicos del barrio, boutiques de creadores y agradables restaurantes a la imagen de este rincón hipermoderno de Montreal. También muy en demanda, el Plateau-Mont-Royal, con sus fachadas multicolores y escaleras de caracol tan populares entre los turistas, hace un contraste perfecto con los tonos en cobre y púrpura de los árboles de la calle.

A unos cuantos kilómetros...

A menos de una hora en coche le espera una explosión de colores, empezando por el Arboretum Morgan, en Sainte-Anne-de-Bellevue, una reserva natural alucinante. El Parc-nature du Cap-Saint-Jacques, el más grande de Quebec, está marcado con magníficos senderos a orillas del lago Lac-des-Deux-Montagnes y el río Rivière des Prairies. Tampoco se pierda los parques Parc-nature de l’Anse-à-l’Orme, Parc-nature du Bois-de-Liesse, Parc-nature du Bois-de-l’Île-Bizard, Parc-nature de l'Île-de-la-Visitation, así como el Parc-nature de la Pointe-aux-Prairies. En Rigaud, la cabane à sucre, Sucrerie de la Montagne, ofrece sus delicias de maple durante todo el año en un encantador entorno de otoño.

... Y un poquito más lejos

Los más curiosos querrán añadir una o dos horas a su paseo para disfrutar de excepcionales escapadas de un día. Granjas y colinas salpican la región de los Cantons-de-l’Est, al sureste de Montreal, que tiene algunos de los pueblos más encantadores de Quebec, como North Hatley, Eastman, Knowlton, Frelighsburg y Sutton.  El otoño es especialmente propicio para descubrir las queserías, sidrerías, viñedos y huertas donde ¡todo es muy bonito! - Uno mismo puede cortar sus propias manzanas. Al norte de Montreal, el denso bosque de los Laurentides y la región de Lanaudière ofrece un telón de fondo idílico para admirar el cambio de los colores. La topografía montañosa y los diversos lagos atraen a excursionistas y ciclistas. 

Isa Tousignant, bloguera 

Isa Tousignant es una periodista de arte y estilo de vida que reside en el sector multicultural de Parc Extension en Montreal. Cuando no está paseando a su pug, recorre exhibiciones, compra artículos antiguos, recorre la metrópolis o incluso crea modelos de joyería para su marca, Gré.