10 LUGARES IMPRESCINDIBLES PARA UNA PRIMERA VISITA A MONTREAL

Descubra el Mont Royal y el mirador de Kondiaronk

Diseñado por Frederick Law Olmsted (el mismo arquitecto paisajista que diseñó el Central Park de Nueva York), el parque “montaña”, en el corazón de la ciudad, es el lugar más emblemático de Montreal y el más popular para tomarse una selfie. Suba las escaleras o reserve una visita guiada al mirador de Kondiaronk en la cima del Mont Royal. En el chalet ubicado en la cima, los visitantes encontrarán baños y una pequeña cafetería para tomarse un refrigerio. Disfrute de dos horas revitalizantes.

Recorra las boutiques de la calle Sainte-Catherine

Entre las arterias comerciales más largas de Canadá, la calle Sainte-Catherine es el lugar perfecto para ver los aparadores y mimarse un poco. Aquí encontrará pilares de la moda internacional como Victoria Secret, Zara y H & M., pero no se pierda los minoristas regionales, como la boutique de artículos de piel montrealense M0851, Little Burgundy y su selección de calzado moderno, así como la gran tienda popular Simons y su extensa gama de productos.

Pruebe la cocina típica montrealense

Los pequeños restaurantes y la buena comida forman parte de la alegría de vivir de Montreal. Hínquele el diente a un delicioso sándwich de carne ahumada en el mundialmente famoso restaurante Schwartz’s. Descubra por qué a los montrealenses les encantan los bagels horneados con leña en las panaderías de la calle Fairmount o Saint-Viateur. (Dato curioso: Los bagels se sumergen en agua con miel antes de hornearlos). Pruebe nuestra famosa poutine en el restaurante La Banquise. Después, calme su sed con una bebida de producción local, como Rise Kombucha o 1642 Cola.

Viaje en el tiempo (en el Viejo Montreal)

Una primera visita a Montreal no está completa sin haber paseado por las encantadoras calles adoquinadas del barrio histórico de la ciudad. Con estilos arquitectónicos yuxtapuestos que datan de 1685, los visitantes tienen la oportunidad de ver literalmente cómo empezó el desarrollo de la ciudad. Deténgase en la basílica Notre-Dame para admirar sus impresionantes vitrales (y para un momento de calma). Después, diríjase a la histórica plaza Jacques-Cartier y póngase cómodo en una terraza, donde estará perfectamente ubicado para admirar a los artistas callejeros y a los retratistas: Y donde la sangría fluye libremente. 

¿Por qué no hacer un recorrido ya que están en el Viejo Montréal? TourBird ofrece un paseo sonoro autoguiado que pueden hacer en español, en su teléfono. 

Suba al Oratoire Saint-Joseph

Saint-Joseph es considerado a menudo el santo de la vida cotidiana. Sin embargo, no todos los días se puede visitar uno de los lugares de peregrinación católica más populares del mundo. El Oratoire Saint-Joseph es una de las obras maestras de Montreal: La pieza de resistencia en la ciudad de los mil campanarios. El Oratorio alberga un magnífico órgano Rudolf von Beckerath, clasificado entre los 10 más prestigiosos del mundo. Asimismo, la enorme cúpula de la basílica alcanza los 97 metros, lo que la sitúa en segundo lugar después de la cúpula de la Basílica de San Pedro en Roma. Se ofrecen exposiciones temporales durante todo el año. Tome el metro hasta la estación Côte-des-Neiges, después suba la famosa escalera del Oratorio.

Explore el Montreal subterráneo

Montreal cuenta con una vasta red peatonal subterránea que tiene, para ser exactos, 32 km de pasajes conectados. Durante los meses de invierno, aproximadamente 500,000 personas circulan diariamente hasta allí para acceder a oficinas, estaciones, comercios y restaurantes. Denominado RÉSO, este sistema conecta el centro de convenciones de la ciudad, 10 hoteles importantes y varios centros comerciales (Centro Eaton). Descargue un mapa en PDF aquí y láncese a una aventura urbana fuera de lo común.

“I went to the market mon p’tit panier sous mon bras”

"Fui al mercado con mi canasta bajo el brazo"

A los habitantes de Montreal les encanta comer. Por supuesto que tenemos nuestra cocina típica local (ver arriba), pero una de las mejores maneras de descubrir la ciudad es visitando uno de los mercados públicos locales. Con una amplia gama de productos regionales de todo Quebec, el Mercado Jean-Talon, ubicado en el centro de la Petite-Italie, es el mercado más grande y con mayor diversidad cultural de Montreal. Una opción más pequeña, pero que también tiene lo suyo, es el Mercado Atwater y su estilo Art deco ofrece una gama de productos especializados y de carnes frías. (Además, está ubicado al lado del pintoresco canal Lachine). Dondequiera que vaya, asegúrese de probar las golosinas de la temporada, como la miel de maple en la primavera, las fresas en el verano y las manzanas Macintosh en el otoño.

Una inmersión en la vida de los montrealenses

Las coloridas escaleras de caracol del barrio “le Plateau” presentan una imagen icónica de Montreal. En este barrio, encontrará una comunidad predominantemente de habla francesa que presenta una mezcla ecléctica de artistas, estudiantes extranjeros y jóvenes profesionales, aderezado con una dosis saludable de otras culturas e idiomas que proyecta el cociente de diversidad a un nivel aún más alto. Para una probadita del Plateau, camine por la avenida Mont-Royal, recargue la batería en el Café Névé, después vaya a almorzar al elegante bistró Chez Victoire (1453, avenue du Mont-Royal Est). O, si hace buen tiempo, le recomendamos hacer como los lugareños: Organice un picnic y relájese bajo los frondosos árboles del apacible parque La Fontaine.

Vaya hacia el Este para un festín de atracciones

El barrio de Hochelaga-Maisonneuve, ubicado en el extremo este de Montreal, tiene varias atracciones impresionantes, todas muy cerca unas de otras. Para empezar, el Estadio Olímpico, que es un gran recordatorio de los Juegos de Verano de 1976 que han pasado a la historia, y posiblemente la estructura arquitectónica más reconocible de toda la ciudad. En la torre inclinada del estadio (incluso más alta que la Torre inclinada de Pisa), los visitantes pueden tomar un funicular para disfrutar de una vista panorámica del paisaje urbano (cerrado por reformas, reapertura en otoño de 2024). También en este barrio se encuentra el Jardín Botánico de Montreal de fama internacional, que cuenta con instalaciones de temporada, como el popular Festival de las Linternas Chinas durante los meses de otoño. Y, por último, pero no menos importante, el Biodôme donde hay cinco ecosistemas que albergan más de 250 especies diferentes de animales que les encantarán a los niños.

“Dame un museo y lo llenaré” – Pablo Picasso

Montreal es una ciudad creativa. Los visitantes que aman el arte apreciarán los numerosos museos y galerías que presentan obras históricas y contemporáneas. Una de las instituciones más importantes de América del Norte, el Museo de Bellas Artes de Montreal, es uno de los lugares de preferencia de los amantes del arte. Sus múltiples salas contienen pinturas, esculturas, artes gráficas, fotografía y artes decorativas, y la galería se enorgullece de presentar exhibiciones temporales de nivel mundial. Para un enfoque más moderno, visite el primer museo en Canadá dedicado exclusivamente al arte contemporáneo. El Museo de Arte Contemporáneo presenta una colección permanente, así como diferentes eventos multimedia. Por último, el Centre Phi presenta obras artísticas en todas sus formas. Consulte el horario para ver la lista de espectáculos.

Daniel Baylis

Daniel Baylis es autor y aventurero. Originario de Columbia Británica, estableció su domicilio en Montreal convencido de que allí escribiría poesía, aprendería francés y encontraría el amor verdadero. Habiendo conocido varios grados de éxito en estas áreas, sus nuevos pasatiempos incluyen preparar adobos caseros.